iPhone 5S, ¿éxito en tecnología o lección de mercadotecnia?

A unas semanas de haber liberado su nuevo iPhone 5, Apple ha recibido innumerables comentarios, unos a favor y otros a manera de crítica, en un afán de imputarle una simbólica discordia entre la magia de la legítima tecnología y una probable y sagaz estrategia mercadológica.

Para entender lo que sucede en torno a la más reciente versión del dispositivo estrella de la firma de la manzana, en el presente artículo analizaremos algunos de los avances que la compañía ha conseguido en su dispositivo, y que han atraído la atención de los consumidores, pero también de los críticos en la industria, pues en medio de su perfil innovador, se registran ciertas vulnerabilidades como su nuevo sensor de reconocimiento táctil.

Lo cierto es que, a días de su lanzamiento, las expectativas en la bolsa bursátil norteamericana estuvieron centradas en el comportamiento accionario de Apple, lo cual, al decir de la agencia alemana de noticias, Reuters, representaron duros golpes en los precios de la compañía desde hace algunos meses, debido a un relajamiento en la penetración comercial de sus productos.

De manera extraoficial se había anunciado por parte de la compañía que al nuevo dispositivo se le integraría tecnología NFC (Near Field Communications) un emergente protocolo de comunicación de rango corto pero con gran capacidad de transferencia de datos. Además, un estándar que ha permitido la diversificación de pagos en línea utilizando el celular como monedero electrónico. Desafortunadamente el nuevo 5S no lo integra.

Presumiblemente el nuevo celular vendría con una memoria de 128 GB y un cámara de 12 Mpx, sin embargo esto tampoco se resuelve en la nueva versión. La actualización del software de mapas tampoco logró conjurarse y esto incomodó a muchos de los usuarios.

En cuanto a vulnerabilidad o niveles de seguridad, hackers pertenecientes al Club del Caos de Computación (CCC) documentó el hackeo de este sensor de seguridad.

El sensor TouchID integrado en el modelo del iPhone ofrece presuntamente la ventaja de seguridad de alto nivel, ofreciendo el acceso exclusivo al usuario mediante su huella digital, sin embargo los especialistas en computación de este club, documentaron con video y fotografías lo sencillo que es burlar al sistema.

En cuanto a tecnología futurista se refiere, los críticos de Apple subrayaron que la tan esperada plataforma de reconocimiento biométrico embebido, específicamente el sistema detector de patrones oculares, no fue posible. El objetivo de este sistema era observar el ojo y el posicionamiento de la cabeza del usuario para que el sistema se adaptara automáticamente, pausando la reproducción de un video, poniendo en espera llamadas, inclusive apagándose automáticamente si la persona quedara dormida.

En términos electrónicos ¿resulta lo suficiente innovador como para tomarlo como un dispositivo de la moderna era tecnológica?