David Simnick ha asistido a
varias rondas de inversiones consiguiendo US$150,000 usando un look
casual-deportivo: jeans, camisetas y alpargatas. El co-fundador de 25 años de
SoapBox Soaps, tenía un clóset que él llamaba “relajado”. Su socio, Dan Doll,
vestía de forma parecida. Pero un día, su imagen jugó en su contra.
Al buscar más de US$100,000 en una establecida
firma de inversiones, Dall y Simnick entraron a la reunión usando el mismo atuendo
informal de siempre. Después de la presentación, mientras manejaban de regreso
a casa, recibieron una llamada de un mentor que había asistido a la sesión.
Fue una llamada de “¡¿En qué estabas
pensando?!”, dice Simnick, quien pensaba que vestirse muy formal lo haría
parecer desesperado por obtener dinero. “Nuestro mentor nos dijo que,
especialmente por nuestra vestimenta, hicimos una terrible impresión en un
inversor de mediana edad que rechazó darnos financiamiento”.
Simnick y Doll decidieron que nunca cometerían
el mismo error. “Whole Foods es una reunión que amerita flip-flops, las cadenas
pequeñas de supermercado ameritan caquis, y las cadenas nacionales grandes
requieren traje y corbata”, afirma Simnick. “Hemos aprendido a emparejar la
forma en que nos vestimos a la persona con la que hablaremos”.
Aunque los emprendedores
no quieren sentir que deben seguir una etiqueta de vestimenta, los expertos
recomiendan buscar una media funcional:
1. Vístete
para la ocasión
Buccellato describe a un cliente de alto perfil
en su organización y quien típicamente usaba pantalones caqui y camisetas polo
en su trabajo. Como éste era su atuendo típico, no pensó dos veces antes de
usarlo para una sesión en video sobre la empresa para publicar en YouTube. Los directivos se dieron cuenta, después del hecho, que
esa vestimenta no se alineaba con la presentación ideal de la marca.
2. No imites
Michéle Benza, consultora en imagen que tiene
clientela en Silicon Valley, describe a una emprendedora que sabía que su
vestimenta formal en las reuniones era una de las razones por las que no ganaba
clientes. “Ella vino a mí, queriendo modelar un nuevo look basándose en una celebridad de la televisión, lo cual no era
adecuado para ella”, dice Benza. “En general es mejor no imitar y buscar tu
estilo personal”.
Para las personas que no cuentan con presupuesto
para contratar a un consultor en imagen, Benza sugiere buscar a vendedores de
tiendas de prestigio al por menor o a personas cercanas a ti a quien pudieras
confiar tu estilo, según tu agenda y posición.
3. Practica
usar ropa nueva
Ya sea que hayas decidido experimentar con un
estilo elegante o casual, tu nuevo look siempre parecerá extraño en un
principio. “No hay nada peor que sentirse incómodo con la ropa nueva en una
reunión, así que literalmente practica usarla en casa”, dice Benza. Si esto te suena
como ensayo de vestimenta, eso es lo que es. “Necesitas portar el atuendo
completo, incluyendo accesorios y zapatos”, dice, destacando que se necesitan
al menos 12 pruebas para sentirte realmente cómodo.
4. Haz
branding de color apropiadamente
Brandon Evans, fundador y CEO de Crowdtap, una
plataforma de marketing de influencia, usa sus tenis Converse rojos en todas
sus pláticas. “Este calzado realmente destaca, dándoles a los asistentes una
forma fácil de que me encuentren en el resto del evento y otorgando una
declaración más sólida que un traje o una corbata”, sostiene el empresario,
señalando que el rojo también es el color de su marca.
5. Cuando
dudes, vete a la segura
Aunque muchos emprendedores quieran presentarse
en un estilo “lo que ves es lo que hay”, algunas veces su ideología es
demasiado suya. “Pregúntate a quién le estás hablando y por qué”, recomienda
Buccellato. “Y cuando estés en dudas, considera que la auto-expresión está
mejor reservada para tu vida personal”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario