Internet originó que los perfiles profesionales se hicieran visibles y de fácil acceso. LinkedIn, la red social para profesionales, es uno de los principales espacios para que los reclutadores encuentren o descarten candidatos. Es por eso que te decimos qué NO debes hacer en esta Social Media:
Fotografías retocadas o inapropiadas: Debes incluir una fotografía profesional que abarque de la cabeza a los hombros. Evita editar tu foto, el objetivo es que te reconozcan en las entrevistas de trabajo.
Recomendaciones de amigos: LinkedIn funciona mejor cuando son auténticas y las proporcionan gerentes, clientes, o personas a las que les hayas brindado un excelente servicio.
Aceptar a todos a tu red: Lo que LinkedIn busca es conectar a las personas de tu profesión o sector, aceptar cada invitación debilita la calidad de tu red.
Cambio de fechas: Dónde trabajaste, cuándo y por cuánto tiempo son elementos clave para cualquier empleador potencial, así que no falsifiques ni trates de llenar espacios vacíos con una falsa experiencia laboral.
Darte promoción excesiva: Los reclutadores saben cuándo algo no cuadra y te verán como una persona deshonesta. Una pequeña mentira puede provocar la reducción de las posibilidades de preselección o incluso si pasas la preselección, la entrevista de trabajo puede enfocarse directamente a probar tu historial de trabajo a detalle.
Tomar crédito por el trabajo de otros: Cualquier declaración o comentario que hagas puede ser visto por mucha gente, incluidos los compañeros de trabajo y antiguos colegas, asegúrate de que realmente sean tus logros ya que promocionar un éxito que pertenece a otra persona es deshonesto y sólo dañará tu reputación a largo plazo.
Existen consultorías especializadas en el reclutamiento y aseguran que en un documento los expertos pueden detectar información falsa y las inconsistencias en datos de un perfil en línea de forma muy rápida.
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