Te explicamos que elementos debes desarrollar para predecir el futuro
del marketing y la forma de consumir.
No necesitas a
una adivina que te lea el café o las cartas para conocer el futuro. La clave
para saber algunos de los acontecimientos venideros, se encuentran más cerca de
lo que crees. En realidad se trata de desarrollar la observación detallada del
presente y de reestablecer ideas de manera lógica.
Así que si quieres
convertirte en un trend hunter, toma nota de las habilidades que debes cultivar
para desarrollarlas:
1.- Capacidad
de observación
La sociedad y
sus cambios, constantemente nos dan pistas de cuáles serán las tendencias del
consumo en el futuro. Por eso es importante que te conviertas en un verdadero
observador de todo lo que te rodea. Por un momento deja de mirar la pantalla
del celular y fíjate en detalles que la mayoría pasaría de largo; ¿cómo actúa
la gente ante ciertos estímulos?, ¿cuáles son las dificultades que enfrentan en
su vida diaria?, ¿cómo se comportan al momento de realizar una compra o elegir
una marca?
2.- Curiosidad
Un auténtico
curioso no se queda con lo que recibe, sino que está dispuesto a ir mucho más
allá para descubrir lo que hay detrás. Un cazador de tendencias es un curioso
natural: está ávido de aprendizaje y quiere entender por qué la gente actúa de
cierta manera o por qué y cómo se transforman las sociedades. Investiga todo lo
que puedas, entra a sitios web de distintas partes del mundo y hojea
periódicamente revistas que hablen de otros temas de los que comúnmente te
interesan.
3.- Intuición
Probablemente
este sea uno de los consejos menos tradicionales que compartimos. Es esencial
desarrollar la habilidad de cambiar de mentalidad y dejar las cosas ir, de esta
manera, si una idea no logra funcionar, puedes pasar a otra sin recorrer un
cambio largo y doloroso. Ser perceptivo te permite ver desde otros ángulos y
empatizar con diferentes tipos de personas. También te ayudará a mantenerte
dinámico y a nunca estancarte en un pensamiento. Un cazador de tendencias debe
estar dispuesto a cambiar todo el tiempo y a no aferrarse a un estado o
estrategia.
4.- La vida
moderna es irónica: cada día nos vemos forzados a aprender más, pero tenemos
menos tiempo para realmente pensar y reflexionar. Recibimos cientos de mensajes
provenientes de los medios de comunicación, de la gente que nos rodea, y hasta
de las calles por las que caminamos, por lo que estamos acostumbrados a
dejarlos pasar sin hacer razonamiento alguno. Si realmente quieres predecir las
tendencias que marcarán el consumo y la forma de vender, debes darte minutos
para pensar. No sólo encontrarás buenas ideas, sino que también podrás procesar
toda la información que recibiste en el día, darle orden y sentido y descubrir
cuál es el camino que debes seguir.
5.- Elegancia
No lo tomes
como la forma en que vistes o hablas, sino a tu manera de ejecutar. La
elegancia exige usar menos elementos. Los cuales son elegidos con sumo cuidado.
Al momento de observar a tu alrededor, investigar nuevas cosas, cambiar de
ideas y analizar la información que recibiste (o sea los pasos anteriores), es
primordial que tomes únicamente aquello que te sirva para innovar y adelantarte
a esos deseos de los consumidores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario